Pero cuando la primera de aquellas semillas comenzó a germinar, descubrieron que no sería tarea fácil. Precisamente en aquel pequeño claro vivía un grupo de monos, y los más pequeños se divertían arrojando plátanos a cualquier planta que vieran crecer. De esa forma se divertían, aprendían a lanzar plátanos, y mantenían el claro libre de vegetación.
Aquella primera semilla se llevó un platanazo de tal calibre, que quedó casi partida por la mitad. Y cuando contó a las demás amigas su desgracia, todas estuvieron de acuerdo en que lo mejor sería esperar sin crecer a que aquel grupo de monos cambiara su residencia.
Todas, menos una, que pensaba que al menos debía intentarlo. Y cuando lo intentó, recibió su platanazo, que la dejó doblada por la mitad. Las demás semillas su unieron para pedirle que dejara de intentarlo, pero aquella semillita estaba completamente decidida a convertirse en un árbol, y una y otra vez volvía a intentar crecer. Con cada nueva ocasión, los pequeños monos pudieron ajustar un poco más su puntería gracias a nuestra pequeña plantita, que volvía a quedar doblada.
Pero la semillita no se rindió. Con cada nuevo platanazo lo intentaba con más fuerza, a pesar de que sus compañeras le suplicaban que dejase de hacerlo y esperase a que no hubiera peligro. Y así, durante días, semanas y meses, la plantita sufrió el ataque de los monos que trataban de parar su crecimiento, doblándola siempre por la mitad. Sólo algunos días conseguía evitar todos los plátanos, pero al día siguiente, algún otro mono acertaba, y todo volvía a empezar.
Hasta que un día no se dobló. Recibió un platanazo, y luego otro, y luego otro más, y con ninguno de ellos llegó a doblarse la joven planta. Y es que había recibido tantos golpes, y se había doblado tantas veces, que estaba llena de duros nudos y cicatrices que la hacían crecer y desarrollarse más fuertemente que el resto de semillas. Así, su fino tronco se fue haciendo más grueso y resistente, hasta superar el impacto de un plátano. Y para entonces, era ya tan fuerte, que los pequeños monos no pudieron tampoco arrancar la plantita con las manos. Y allí continuó, creciendo, creciendo y creciendo.
Y, gracias a la extraordinaria fuerza de su tronco, pudo seguir superando todas las dificultades, hasta convertirse en el más majestuoso árbol de la selva. Mientras, sus compañeras seguían ocultas en en el suelo. Y seguían como siempre, esperando que aquellos terroríficos monos abandonaran el lugar, sin saber que precisamente esos monos eran los únicos capaces de fortalecer sus troncos a base de platanazos, para prepararlos para todos los problemas que encontrarían durante su crecimiento.
Autor: Pedro Pablo Sacristán
¿Cómo puedes aprovechar las contrariedades para crecer?
Ana María R. Novoa
Hola , Ana Mari me ha encantado este entrada y le he visto el significado . La semilla que no se rendió tiene una gran fuerza de voluntad y se diría a si mismo que estos monos con sus jueguecitos de tirar plátanos no van a ser capaz de impedirme crecer y yo poco a poco poniendo gotita a gotita a mi esfuerzo seguro que lo consigo y asi fue ella fue positiva porque se puso las gafas del buen pensamiento y lo consiguió . Adiós . bs
ResponderEliminarHola Ana Mari:
ResponderEliminarAquí te dejo una poesia sobre que que nunca debes rendirte:
No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños
Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.
Mario Benedetti
Adiós.
Hola Ana Mari. Este cuento es muy bonito. Las semillas se rindieron con los juegos de los monos porque le iban a doblar y no podría crecer el árbol. Una semilla dijo que no se iba a rendir porque fue muy positiva y por los juegos de los monos se iban a doblar pero la semilla no se rindió y tuvo muchas fuerzas para crecer. Adiós y el cuento me ha encantado. Bs
ResponderEliminarHola,Ana Mari este blog nuevo me encanta porque te demuestra muchas cosas de todas las mareas de ayudas que pueden existir.Este cuento me ha encantado es muy bonito y demuestra muchos valores.
ResponderEliminarCon cariño,María Dolores
Hola Ana Mari este texto lo he entendido muy bien porque si lo intentamos, lo intentamos una y otra vez, al final lo que queremos lo vamo9s a conseguir. Y si tu te empeñas en lo quieres hacer al final tarde o temprano lo vas a conseguir. Por esperar tanto las otras semillas nunca van a ser árbol.
ResponderEliminarBesos.
Esta semillita se quiere superar y aprendiendo de las adversidades y las dificultades de la vida para conseguir una fortaleza que le llevó a conseguir su sueño. Los monos lo que hacían era plantearles problemas, pero ella estaba decidida a cumplir su sueño y a no parar hasta que lo consiguiera. A pesar de lo pequeña que era tenía una fuerza de voluntad enorme. Las otras prefirieron resignarse a su sueño con tal de no esforzarse y crecer cómodas. Pero nuestra amiga quiso correr riesgos para llegar hasta la cima. Y con cada golpe que recibía, más fuerte se hacía y mayor fuerza tenían sus ideales y su tronco, que crecía hasta que a fuerza de platanazos se convirtió en un tronco robusto que no podía levantar ningún problema, porque sus raíces eran tan fuertes y seguras de si mismas que de ser una pequeña planta, cumplió su sueño de ser un árbol que tocara el cielo con sus ramas.
ResponderEliminarHola Ana Marí,este cuento es muy bonito.
ResponderEliminarMe parece muy mal que los monos tiraran plátanos a las plantas que iban a crecer,para que no crecieran.
Pero una semilla no se rindió y de tantos platanazos que le dieron y ya no se podía doblar.
Y así se convirtió en un hermoso árbol.
Adiós
Hola Ana Mari el comentario anterior se me ha borrado, y por eso te lo voy a escribir de nuevo. A mí este cuento me refleja que no te puedes rendir nunca, porque aunque lo estés pasando muy mal, como la semilla, que se llevó un montón de platanazos. Además los golpes te hacen más fuerte, y luego ya no te harán daño esos mismos golpes. Por ejemplo, esta semilla cuando se llevó tantos platanazos que luego ya no le hacían daño, al revés se reía de ellos. Cuando los monos se dieron cuenta de que la semilla ya estaba agarrada a la tierra y ya iba a ser un árbol fuerte y fornido al que no le iban a afectar los platanazos, ni la podían quitar los monos con las manos.
ResponderEliminarHola Ana Mari, esta entrada me ha gustado muchísimo. Además creo que la semilla es muy valiente y tiene mucha fuerza de voluntad. También si no se rindió es porque es muy fuerte.Ana Mari, ¿podías poner mas cosas de estas?.¡¡¡son muy entretenidas !!!!!
ResponderEliminarGRACIAS POR TODO
MUCHOS BESOS
Hola Ana Mari, este blog me gusta mucho. Creo que las semillas que no quisieron germinar, no fueron valientes y se quedaron muy pequeñitas, sin embargo, la otra fue valiente y se hizo fuerte y grande, creo que las otras deberian haber sido valientes.
ResponderEliminarLa planta me ha encantado a pesar de todas las veces que le han doblado los plátanos.¡Me encanta esa planta! y ¡Me encanta tu blog!
ResponderEliminarHola Ana Mari.
ResponderEliminarA mi me ha justado mucho el cuento de las semillas.
También los monos hacían mal en tirarle plátanos a la plantas, pero tenemos que pensar en los monítos que eran pequeños y no sabían lo que hacían.Si soñamos a lo mejor algún día ese sueño se cumplirá
Hola Ana Mari me encanta tu nuevo blog,es muy bonito con todas las mariposas tan bonitas.Este cuento me ha gustado mucho porque la semilla yo creo que tiene mucha valentía y coraje.Ella sabe defenderse sola y por si misma.
ResponderEliminarHola Ana Mari.
ResponderEliminarEste cuento es bueno,porque la planta aguanto tanto que se hizo muy fuerte y pudo aguantar los fuertes plátanos
de los monos.
La planta no se rindió y siguió luchando para que pudiera
crecer mas y poder estar sana y fuerte.
David
Ana Mari el cuento es maravilloso y precioso. Sabes hay que saber valorar nuestras cosas. La semillita nunca se rindió y me parece muy bien por que nunca hay que darse por vencida. Por que al final eres tu la que sales ganando, fuerza valentía y poder salir adelante sea cual sea la barrera que nos encontremos. Desde mi punto de vista las demás podían haber aprendido de lo fuerte que era su amiga.Y de lo bonito que sería ser el árbol en el que se convirtió su amiga
ResponderEliminarGracias por ayudarme
Hola Ana Marí.Yo quería decirte que hay que ir todo el mundo detrás de nuestro sueño porque no nos tenemos que rendir.Como ha hecho la semillita y no hay que rendirse como las otras semillas.Yo quisiera ser maestra y para eso tengo que ir detrás de mi sueño.
ResponderEliminarSaludos y besos,Adiós.
Hola Ana Marí.Yo quería decirte que hay que ir todo el mundo detrás de nuestro sueño porque no nos tenemos que rendir.Como ha hecho la semillita y no hay que rendirse como las otras semillas.
ResponderEliminarHola Ana Mari el cuento me ha gustado mucho por que va una planta que se quiere convertir en un árbol y se enfrentaba a los monos para crecer y las otras no querían crecer por que le daban miedo los monos. Y me gusta mucho por que la semilla se enfrentaron a sus miedos.
ResponderEliminarBesos Victoria Mª Bernal Gómez. =) (L)
Hola Ana Mari el cuento nos gustó mucho.
ResponderEliminarNunca hay que darse por vencido si quieres conseguir lo que quieres y la semilla eligió no rendirse.
Aunque recibió muchos golpes no se rindió y siguió adelante.
Nosotras creemos que hay que hacer como la semilla para conseguir nuestros sueños.
Hola Ana Mari,este cuento me ha gustado mucho porque la semilla yo creo que tiene mucha valentía y coraje.Ella sabe defenderse sola y por si misma.
ResponderEliminarHola, Ana Mari, este cuento me ha gustado por varias razones, la principal que he entendido de este cuento es que si tu quieres conseguir algo, debes de ser resistente y constante con lo que quieres y que tienes que tener el "Pensamiento Positivo Permanente",las reglas de la "P".
ResponderEliminarY la que no me ha gustado es el comportamiento de los monos que lo que están haciendo es destrozar la naturaleza.
A mi me ha enseñado este cuento que nunca hay rendirse pase lo que pase. Por ejemplo si te caes te vuelves a levantar y así sucesivamente, que seguro que algún día llegamos a nuestra meta.
ResponderEliminarHola Ana Mari, este cuento es muy bonito por que la planta quería convertirse en árbol y con los monos tirándoles plátanos no podían crecer y se hartó y les plantó cara y le dejaron crecer tranquila y por fin se convirtió en un hermoso plátano.
ResponderEliminarme ha gustado mucho lo de la planta por que por muchos platanazos que le pegaran no se rendía hasta que llego a ser un fuerte árbol
ResponderEliminarhola Ana Mari, este cuento está muy bien porque te dice que tu tienes que seguir tu sueño y no dejar que los demás te digan lo que tienes que hacer; porque si tu sueño lo juzgan tus amigos nunca lo vas o lograr.
ResponderEliminarHola Ana Mari este cuento me ha gustado mucho porque es muy bonito.Y porque te hace pensar mucho.
ResponderEliminarUn beso tu alumna Anabel.
HOLA ANA MARI.
ResponderEliminarEste blog nuevo esta muy bonito de color morado y el cuento este es muy bonito porque te enseña las cosas de la vida y que tienes que ser fuerte para toda esta vida que nos queda por delante.
Besos ANA MARI DE LEYRE
Hola Ana Mari:
ResponderEliminarEste nuevo blog me gusta mucho, me parece muy interesante. Esta historia me ha gustado mucho.
Para mí la semilla ha sido muy valiente y ha tenido mucha voluntad. Esta entrada me ha significado, que nunca hay que rendirse. Bueno muchas gracias por ponerlo bss
Ana Mari este cuento es muy bonito pero me parece fatal la actitud de los monos por que todo el mundo tiene derecho a vivir en paz sin ninguna complicación que te pongan tus amigos o tus familiares todo el mundo debería de ayudarse mutua mente por que deberemos ser impaticos con las otras personas por que si no todo los dias se estarian peleando alguien y eso no es muy logico bueno.
ResponderEliminaradios
Ana Mari este cuento me ha encantado.Para mí la semilla ha sido muy valiente y también ha sido fuerte y ha tenido mucha voluntad.Esta historia nos enseña a seguir nuestros sueños y a ser fuertes y por más y más dificultades que te vengan no te rindas y sé fuerte para hacer tu sueño realidad.
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